En mayo pasado, el técnico del Fenerbahce negó los rumores sobre supuestas conversaciones con directivos de la Federación Portuguesa de Fútbol para convertirse en seleccionador nacional. Se había informado que dejaría al club turco al final de la temporada pasada para reemplazar a Roberto Martinez tras las finales de la Liga de Naciones en junio.
Mourinho quiere dirigir a un equipo en Portugal
En ese momento, Mourinho habló sobre el tema y dejó claro que su deseo es entrenar en Portugal cuando esté en su mejor momento, algo que considera que aún no ha alcanzado.
"Sin duda, voy a venir a Portugal. Todavía no ha ocurrido, pero sucederá", declaró Mourinho a Sport TV después de la victoria de su equipo por 1-2 en el amistoso de pretemporada del jueves ante el Portimonense en Albufeira.
"No es porque sienta que estoy cerca del final, me siento lejos de eso. No quiero venir a Portugal para una jubilación dorada ni para los últimos años de mi carrera. Quiero regresar a Portugal en la cima de mi carrera, estando bien de salud y fuerte tanto física como mentalmente. Seguro que volveré", agregó.
Dirigir a Portugal es el destino de Mourinho
El exentrenador del Chelsea y del Real Madrid ha ido más allá y ahora no solo habla de entrenar en Portugal, sino de dirigir a la selección nacional en un futuro Mundial, posiblemente en 2030, cuando el torneo regrese a Europa.
"Estoy fuera de Portugal desde 2004 y no creo que mi país aceptara que yo entrenara a otra selección que no fuera la mía. Mi destino, en cuanto a selecciones, es disputar un Mundial con la selección portuguesa. Nunca me planteé entrenar a Brasil", dijo.
"Mi primera experiencia tiene que ser con Portugal, y después la gente debe entender que soy un profesional y que puedo dirigir a otros equipos, pero siempre selecciones con las que tenga algún vínculo. Brasil, obviamente, por la relación histórica entre nuestros países; Inglaterra, porque es mi casa; Italia, donde trabajé varios años. Pero mi primera experiencia con una selección debe ser con la mía", expresó el técnico.
El año pasado reveló que ya había rechazado en dos ocasiones la oportunidad de dirigir a Portugal, pero si la ocasión se presenta de nuevo, puede que no diga que no, especialmente a medida que se acerca 2030.