Palou, que pugna por su tercer título consecutivo en la IndyCar, llegará así en plena forma al gran reto de las 500 Millas de Indianápolis, el 25 de mayo, donde aspira a convertirse en el primer piloto español en ganar la emblemática carrera.
En la última prueba, la figura del equipo Chip Ganassi Racing salió en la pole en el Indianapolis Motor Speedway, pero fue adelantado en la curva inicial por el estadounidense Graham Rahal.
El local lideró durante 49 vueltas hasta que Palou retomó la cabeza gracias a una inteligente estrategia de cambio de neumáticos.
El catalán, poseedor de tres coronas de IndyCar desde 2021, ya había ganado este año las carreras de San Petersburgo (Florida), Thermal (California) y Birmingham (Alabama).
"No puedo describir la increíble temporada que hemos tenido hasta ahora", se felicitó Álex, que dispone de una enorme ventaja de 97 puntos sobre el estadounidense Kyle Kirkwood, segundo en la clasificación general.
"Se lo debo todo al jefe del equipo Ganassi, a mis compañeros y a todos los que trabajan entre bastidores para que yo sea tan rápido en la pista", agradeció.
"Ojalá podamos volver a estar (en el podio) dentro de un par de semanas en la carrera más importante del año", agregó A. Palou en referencia a las 500 Millas, donde terminó en el top cinco en tres de las últimas cuatro ediciones.
El mexicano O'Ward, que llegó a 5.48 segundos de Palou, ocupa la cuarta posición general a 100 puntos del español.