Después del subidón que supuso ganar al Barcelona en el Clásico, las tres últimas derrotas han dejado el ánimo de los blancos por los suelos. Primero en ACB ante el Joventut y después las dos de Euroliga: contra el Asvel Villeurbanne en un final polémico por el tapón ilegal sobre Campazzo que fue validado por los árbitros y la canasta de Paris Lee en el último segundo y frente al Fenerbahçe.
El Madrid acumula tres derrotas en liga y ¡ocho! en Euroliga, que le dejarían ahora mismo fuera de los puestos de play-in. A las que hay que unir la final perdida de la Supercopa ante el Unicaja. En Europa ha superado en diciembre el número de derrotas cosechadas en toda la liga regular de la pasada temporada (siete). En ACB, el curso anterior sumó seis encuentros perdidos.
"No estamos contentos"
Chus Mateo mostraba su insatisfacción al término del encuentro ante la escuadra turca. "Hemos tenido malos momentos en otra ocasión y hemos salido adelante juntos. Eso es lo que tenemos que hacer. Ser suficientemente maduros como para afrontar una situación que no está siendo la mejor". Y sentenciaba: "No estamos contentos con nuestro rendimiento".
Y es que pese a que Campazzo y Tavares llevan el peso del equipo en los momentos clave, hay jugadores como Hezonja o Musa que muestran habitualmente su enorme calidad, pero que también tienen momentos en los que se les pide un paso más. El club tiene jugadores de un nivel contrastado que están lejos de dar lo que se espera de ellos. Es el caso de Ibaka, Garuba o Rathan-Mayes. Además, la marcha de Rudy Fernández y el Chacho Rodríguez del club se ha notado en el vestuario.
La competición no para y el domingo viene el Unicaja al WiZink Center. El Madrid tiene que levantarse a la voz de ya.