Centro de estadísticas del Joventut Badalona-Bilbao Basket
Debe ser un gustazo ser protagonista en esos días en los que todo lo que uno toca se convierte en oro. Eso le pasó al Joventut para desgracia de los hombres de negro. En un primer cuarto primoroso, espectacular y extraordinario, la Penya alcanzó la perfección defensiva, dejando en 0/12 al rival en tiros de campo, que solo pudo anotar seis libres. Además, disfrutó en ataque anotando 31 puntos, de los que 10 llevaron la firma de Ricky Rubio en sólo 5:17 en pista. 17 de valoración sumó en ese tiempo el genio del Masnou.
Mantener ese excelso nivel se antojaba improbable. Y lo fue a pesar de Dekker, que elevó la ventaja a los 28. Pero desde ahí, el Bilbao inició la recuperación anotando incluso mejor desde el perímetro que dentro de la zona, haciendo circular la bola con criterio, lo que permitió que Pantzar, Krampelj y Jaworski se combinaran para sumar 16 de los 29 puntos de los suyos en el segundo cuarto. Al descanso, ya llovía menos para los de Jaume Ponsarnau, 49-35.

Cargadas las pilas en el vestuario, el Joventut recuperó las sensaciones del inicio de partido y le endosó un 15-6 en cinco minutos con un Tomic exquisito. Rozaron la máxima renta con +27, pero un acelerón del Bilbao restó eficiencia a ese buen hacer local, dejando el electrónico en 73-53 para abrir las puertas del último cuarto.
No parecía necesario un esfuerzo mayor para ganar el encuentro, pero los catalanes tampoco quisieron regalarle un resultado 'cómodo'. Al contrario, hurgaron en la herida para marcharse de ¡¡35 puntos!! y acabar finalmente sellando una escandalosa y merecida victoria por 101-69.
Los MVP
Ricky Rubio, con 11 puntos, nueve asistencias y seis rebotes, fue el más completo del Joventut, donde el máximo anotador fue Tomic con 17 puntos. En el Bilbao, el mejor fue Pantzar con 10 puntos, siete asistencias y 22 de valoración.