La NBA se encuentra en una era en la que se baten récords prácticamente cada día gracias a contar con los mejores jugadores del planeta. Sin embargo, hay algunas plusmarcas que no son demasiado fáciles de superar y se reservan para unos pocos elegidos.
Uno de esos hombres que parecen tocados por una varita mágica es el pívot de los Denver Nuggets Nikola Jokic (30), que atesora ya tres premios MVP y destila espectáculo cada vez que el balón pasa por sus manos. Dueño de una calidad superlativa, el serbio se destapó hace tiempo como un especialista en acumular triples-dobles.
El Joker es ya el tercero en la clasificación histórica con 168 triples-dobles en liga regular, sólo por detrás de Russell Westbrook (203) y Oscar Robertson (181), pero al ritmo que va, seguramente deje bastante atrás a esas dos leyendas a no mucho tardar.
Y es que, mientras que el ex de los Thunder ha necesitado 1.242 partidos para llegar a su cifra y el ex de los Bucks precisó de 1.040 apariciones, la estrella de los Nuggets apenas lleva 749 encuentros.
Ayudan a lograr esa salvajada cosas como empezar una temporada con cuatro triples-dobles seguidos en los cuatro primeros duelos, como certificó anoche contra los Pelicans, con 21 puntos, 12 rebotes y 10 asistencias. Así, igualó una marca que sólo habían alcanzado Westbrook, en el curso 2020/21, y Robertson, en el 1960/61.
De sumar el quinto el próximo sábado (3.00 horas) ante los Portland Trail Blazers, el serbio sellaría un inicio inédito, pero su mirada está puesta más arriba, quiere ponerse la corona de 'rey del triple-doble'.
 
    