El belga sufre varias complicaciones vinculadas a una prótesis de cadera que le fue puesta tras una caída en bicicleta el pasado mes de diciembre.
Entonces se le instaló una primera prótesis de titanio sin éxito, antes de un nuevo intento con una prótesis cimentada, también infructuosa.
El cinco veces vencedor del Tour de Francia desarrolló además una infección cutánea que le obligó a tomar un fuerte tratamiento antibiótico, declaró a la AFP el pasado 17 de junio durante una recepción en el Palacio Real con ocasión de su 80º cumpleaños.
Merckx deberá pasar de nuevo por el hospital de aquí a un mes para que le sea puesta una nueva prótesis, definitiva en esta ocasión. Hasta entonces, debe quedarse inmovilizado en su casa.
"Por el momento Eddy está sobre todo contento por volver a su casa. Donde se siente más cómodo es en un ambiente familiar", indicó su mujer.