Equivocarse es de humanos, rectificar es de sabios. Marc Márquez, absoluto dominador del Mundial de MotoGP, cometió un error humano en la primera curva en el esprint del sábado, aunque terminó remontando y ganando. Pero no quería volver a dar opciones a sus rivales y tener que arriesgar tanto en la carrera larga. Dicho y hecho. Defendió como un sabio su pole en la salida y marcó un ritmo infernal que nadie pudo seguir. Es lo que tiene ser el mejor piloto de la actualidad. Todo lo que puede hacer bien, lo hace aún mejor. Así que la emoción, un Gran Premio más, se situó por detrás del español.
En la pelea por escoltarle en el podio, Di Gianantonio y Bezzecchi tomaron ventaja a un Álex Márquez más cómodo tras su intervención quirúrgica y que salió muy veloz de la parilla para colocarse tras su estela. Acosta y Bagnaia le siguieron, aunque el murciano, otra vez y ya van nueve en la temporada, se cayó por su exceso de ímpetu. Desde entonces, vuelta cuatro de 33, no hubo cambios en la cabeza de carrera a pesar de los intentos del pequeño de los Márquez por superar a Bezzecchi.
Ocho caídas
Fue en la vuelta 18 cuando comenzó la ristra de accidentes. Di Gianantonio, que rodaba cómodamente segundo, deslizó demasiado su moto para acabar en la grava. Qué pena la del italiano tras abandonar después de una gran actuación.
Un par de curvas después, también cayó Zarco, que se había puesto quinto. Y tres giros después, en el 21, quien rodó por el asfalto fue Bezzecchi. Parecía una maldición lo de ir segundo en Sachsenring. No fue el último accidente, pues en la misma curva uno se accidentaron Joan Mir, Oguri y Salvadori.
Sólo quedaban 10 pilotos en el circuito alemán con los Márquez y Bagnaia en las tres primeras posiciones, y con suficiente ventaja entre todos para acabar cruzando así por la bandera de cuadros. Incontestable el dominio de Marc, que consigue su noveno triunfo en esta pista y aumenta en cinco puntos más su distancia al frente de la general del Mundial con respecto a su hermano, Álex.
Fermín Aldeguer finalizó quinto con Raúl Fernández y Álex Rins noveno y 10º, respectivamente.