Para subir a lo más alto del podio, tuvo que batir el récord de España, dejándolo en 2 minutos, un segundo y 55 centésimas, superando en la prueba al ruso Kiril Prigoda, que posee la plusmarca mundial, y al japonés Yamato Fukasawa.
Su salida, con la segunda mejor reacción, ya fue buena. Y mantuvo la progresión necesaria para ponerse por delante de todos después de cuatro vueltas a la piscina de 25 metros. A falta de dos vueltas fue superado por otro ruso, Zhigalov, pero sólo fue un pequeño sobresalto.
En el siguiente paso, ya para el último largo, Carlos Coll aumentó su potencia de nado para llegar primero y proclamarse campeón del mundo.
"Todavía no me lo creo, pero la verdad es que llegué a este Mundial con mucha confianza", dijo Coll nada más salir de la piscina en declaraciones al micrófono de World Aquatics.