Los italianos cerraban la pretemporada con un amistoso de nivel en Stamford Bridge tras haberse enfrentado a rivales de toda enjundia: desde los potentes Arsenal o Liverpool hasta el humilde Perth Glory. Derrotados por la mínima ante los londinenses, vencieron por 2-4 a los de Anfield y golearon al cuadro australiano (0-9) antes de empatar frente al Leeds United (1-1). Gira bastante inglesa para la escuadra dirigida por Massimiliano Allegri, con un balance decente.
Coubis no olvidará nunca el día en el que ascendió con los mayores en un amistoso contra uno de los gigantes de Europa, pero seguramente tendrá siempre un recuerdo bastante agridulce. La jornada se presentaba bonita para el zaguero, que tuvo la mala fortuna de introducir el cuero en su propia portería cuando apenas había empezado a rodar el balón. Una falta lateral botada por Reece James dio pie al (involuntario) remate del rumano.
Poco después, recién superado el cuarto de hora, el central optó por frenar a Joao Pedro de forma antirreglamentaria. El brasileño recibió un buen pase en profundidad y parecía tener ganada la carrera a su marca, que protagonizó una especie de placaje para evitar que se marchara y encara a Mike Maignan. Aunque no se trataba de un partido oficial, el árbitro castigó la acción del '39' con una tarjeta roja que dejó en inferioridad numérica a los visitantes.
El propio Joao había marcado ya el 2-0 cuando fue agarrado por Andrei, de modo que toda la emoción se disipó de golpe sin haberse alcanzado aún el minuto 20. El ex del Brighton sigue demostrando que su buen hacer en el Mundial no fue ni mucho menos casualidad, ya que marcó también al Bayer Leverkusen y encadena cuatro partidos viendo portería. Los aficionados del Chelsea y los seguidores de la Canarinha, unidos por la ilusión.