La Copa Libertadores y Atlético Nacional son dos conceptos que se entienden. Los verdolagas han ganado en dos ocasiones la competición -la última en 2016 de la mano de Reinaldo Rueda- y quieren volver a tocar el cielo continental. Para ello, el primer paso será derrotar a un Sao Paulo que es siempre complicado.
Nacional llega a los octavos de Libertadores con ambición, pero también con algunas dudas en su esquema. El conjunto antioqueño no ha sido del todo regular en los últimos partidos de Liga (tres victorias, dos empates y una derrota). Nacional, además, perdió a Facundo Bautista para el partido de ida. Así lo confirmó Javier Gandolfi, entrenador de los verdolagas, en la antesala del encuentro.

Los paisas, por otro lado, tienen un peso enorme a sus espaldas. Desde 2016 no han logrado superar la barrera de los octavos de final de la Copa Libertadores. Aunque Atlético Nacional es un protagonista habitual en la competición, el equipo colombiano ha tenido inconvenientes en el torneo continental.
Sao Paulo, con altibajos
El rival de Atlético Nacional, mientras tanto, llega a los octavos de final con varias dudas. La primera gira en torno al cuerpo técnico de Hernán Crespo. El argentino volvió a sentarse en el banquillo del tricolor paulista después de que la directiva despidiera a Zubeldia.
El equipo suma un empate desde que Crespo regresó, con algunas luces y sombras en la Copa de Brasil. La última oportunidad en la que Sao Paulo avanzó a cuartos de Libertadores fue en 2024, cuando derrotó a Nacional de Uruguay con un 2-0 letal en el partido de vuelta de la eliminatoria. La ida había terminado 0-0 en Montevideo.