Por razones que sólo pueden explicar los propios jugadores, los Diablos Rojos han "aparecido" en Europa, y una holgada victoria por 0-3 en la ida de semifinales de la Europa League contra el Athletic Club de Bilbao les sitúa a las puertas de la final, que casualmente se jugará en el impresionante estadio de San Mamés.
A no ser que en Old Trafford se muestren increíblemente complacientes en la vuelta, su camino hacia la final debería ser relativamente fácil, y la historia está del lado del United.
Rúben Amorim, encantado con el resultado de la ida en Bilbao
133 equipos han ganado el partido de ida de una eliminatoria de la Copa de la UEFA/UEFA Europa League por tres o más goles fuera de casa, y los 133 han superado/ganado la eliminatoria.
El jueves por la noche también se produjo la mayor victoria a domicilio del United en una semifinal de una gran competición europea, y la forma en que se produjo dejó impresionado a Amorim.
"Creo que es el mejor resultado, porque nadie lo esperaba", declaró en la rueda de prensa posterior al partido. "Creamos ocasiones, pero lo más importante es que el adversario no disparó a nuestra portería", agregó.

Desde el punto de vista del entrenador, la alegría del éxito europeo tiene que verse atenuada por la patética actuación nacional.
Para poner en contexto la forma diametralmente opuesta del United, ahora han ganado más partidos en la Europa League (siete victorias en nueve partidos) bajo la dirección de Amorim que en la Premier League (seis en 23). Además, los Diablos Rojos sólo han marcado tres goles menos con el técnico portugués en la competición europea (24) que en la liga (27).
Su afirmación de que el United limitó al Athletic Club en cuanto a disparos es cierta en parte. El Athletic tuvo nueve disparos en el partido, frente a los 14 de los visitantes, pero sólo tres de los locales fueron a puerta (siete para el United).
La derrota más abultada del Athletic en casa desde hace siete años
Para situar la ventaja de tres tantos al descanso en un contexto más amplio, la última vez que el plantel de Mánchester marcó tres goles en la primera parte en un partido a domicilio de la fase eliminatoria de una gran competición europea fue en los cuartos de final de la Copa de Europa 1965/66 contra el Benfica.
Por el contrario, el Athletic sufrió su derrota más abultada en casa en todas las competiciones desde que cayó por 0-3 en LaLiga ante el Villarreal en septiembre de 2018. Antes de la noche del jueves, los Leones solo habían encajado dos goles en casa en sus seis partidos de Europa League esta temporada combinados.
Los tres chicharros elevaron también la cuenta de los Diablos Rojos a 31, la mayor cantidad de cualquier equipo en la competición de esta temporada, y han marcado dos o más en 10 partidos diferentes, su cantidad más elevada en una campaña de fútbol europeo importante junto con la Liga de Campeones 2002/03.
Bruno Fernandes sigue siendo el más importante del Manchester United
Fernandes anotó un doblete en Bilbao que sirvió para dar ventaja al United en la eliminatoria, y sólo Mohamed Salah (56), del Liverpool, ha participado directamente en más goles de un equipo de la Premier League en todas las competiciones esta temporada que el portugués (35, con 19 goles y 16 asistencias).
Además, el capitán del United (27 dianas) ya sólo está por detrás de Pierre-Emerick Aubameyang (34) y Radamel Falcao (30) en cuanto a goles marcados en la Europa League, y es el máximo asistente de la competición (18, empatado con Dries Mertens), lo que denota su enorme importancia para este equipo emergente.

Sin embargo, esa noche fue uno de los muchos jugadores visitantes que pueden mantener la cabeza alta.
Para empezar, no muchos equipos han ido a San Mamés y han salido dominando el balón con un 72,6% de posesión.
La tarjeta roja que propició el segundo gol del United casi seguro que influyó en que los visitantes pudieran tocar el balón y hacer trabajar a los locales más de lo que les hubiera gustado, pero el Athletic no es un equipo que se acueste ante nadie y por eso Amorim puede estar entusiasmado por la forma en que su equipo no dejó que los hombres de Valverde reaccionaran.
Los vascos decepcionaron en muchos aspectos ante los Diablos Rojos
Aunque el Athletic fue tan tenaz como su rival de la Premier League, ganando 11 de sus 18 entradas frente a las 12 del United, y sus 10 intercepciones superaron a las siete del United, a la hora de la verdad, los vascos no estuvieron a la altura.
228 pases por 631 de los Diablos Rojos y sólo un 63,4% de pases completados en campo contrario, frente a un 83,7%, cuentan su propia historia.

Inusualmente para el equipo vasco, la precisión de jugadores como Iñaki Williams (41,7%), Nico Williams (53,3%) y Óscar de Marcos (62,5%) fue muy baja, y frente a un equipo en el que Harry Maguire (97,1%), Victor Lindelof (97%) y Leny Yoro (92,5%) lideraron en ese apartado, siempre iba a ser una lucha cuesta arriba.
El Txingurri también estará descontento porque su equipo no pudo aprovechar que el United perdió la posesión del balón 117 veces en el partido, y porque los visitantes sólo permitieron 14 toques en total dentro del área.
Cuartos en LaLiga y jugando bien, los vascos no tuvieron su noche. El resultado de la ida, sin embargo, obligará a Valverde a adoptar su habitual enfoque prudente en Old Trafford, lo que probablemente jugará a favor del United.
