En la recta final del partido ante el Daegu, con el que el Barcelona ha cerrado su gira asiática, cundió el pánico en la expedición azulgrana cuando Pau Cubarsí (18) se sentó sobre el césped y pidió el cambio por unas molestias en la rodilla.
El joven central se echaba la mano a la parte exterior de su rodilla con claros signos de malestar y de dolor, e inmediatamente se le llevó al vestuario. La preocupación era lógica.
Sin embargo, tras una primera exploración, todo parece haberse quedado en un susto, en una contusión que no debería ir más allá. Aunque será a la llegada a Barcelona cuando se le realicen pruebas complementarias para descartar cualquier tipo de lesión de cierta importancia.
La buena noticia es que Pau Cubarsí pudo abandonar por su propio pie el terreno de juego, siendo sustituido por Héctor Fort.
Si todo evoluciona como se espera, es posible que por precaución no juegue el Gamper, pero sí estaría para el comienzo de LaLiga.