Los primeros ocupan la sexta posición con 18 puntos, mientras que los ilicitanos, recién ascendidos desde Segunda, están en novena plaza con unos meritorios 14 tantos.
Un giro radical
Es un cambio importante para ambos clubes respecto a la temporada pasada, ya que el Espanyol solo logró salvarse del descenso por dos puntos.
Acabar en el puesto 14 el curso pasado puede parecer aceptable sobre el papel, pero la realidad es que el equipo catalán estuvo en apuros durante la mayor parte de la 2024/25 y no aseguró la permanencia hasta la última jornada.
¿Qué ha cambiado?
El técnico, Manolo González, ha conseguido al fin que los suyos juegues con una estructura definida pero flexible, lo que les ha convertido en un rival muy complicado de batir.
Por ejemplo, en la primera jornada de la temporada, quedó claro que el Atlético de Madrid no estaba preparado para la presión alta del Espanyol ni para su capacidad de adaptarse a diferentes esquemas tácticos durante el partido.
El 3-2-4-1 ofensivo del Espanyol
El conjunto catalán ha cosechado sus mejores resultados con un sistema ofensivo 3-2-4-1, que sobrecarga la defensa rival y le permite dominar la posesión, pero también le da la opción de replegarse con cinco atrás si lo necesitan en una contra.
Sin balón, Manolo ha apostado por un 4-2-3-1, priorizando una línea defensiva sólida y la capacidad de salir rápido desde atrás si el ataque rival se frustra.
Cuando los equipos han logrado vencerles, ha sido tras un gran esfuerzo para sumar los tres puntos, como demuestra el hecho de que cuadro perico solo ha perdido tres partidos en lo que va de temporada.
Teniendo en cuenta que solo ha vencido al Real Madrid en tres ocasiones desde 2010, perder ante los blancos no fue una sorpresa, aunque la derrota ante el Alavés en la última jornada sí resultó dolorosa.

La otra derrota fue ante un Real Betis en plena recuperación. Y no hay que olvidar que el club perdió al que fue el mejor portero estadísticamente de LaLiga la temporada pasada, Joan García, que se marchó al eterno rival, el Barcelona. Por eso, la transformación del Espanyol esta temporada es aún más meritoria.
Aunque solo ha dado una asistencia en lo que va de campaña, Tyrhys Dolan sigue destacando por su entrega y actitud.
Javi Puado y Pere Milla también son clave para los pericos en la 25/26, aunque el primero está ahora lesionado.
El Elche, el equipo espectáculo
En el caso del Elche, no debería sorprender que su propuesta sea claramente ofensiva y pensada para entretener.
Al fin y al cabo, el juego de posesión de Eder Sarabia tiene su origen en su etapa como asistente de Quique Setién.
Ambos coincidieron primero en Las Palmas, luego con más éxito en el Real Betis y después con bastante menos en el Barcelona, donde, pese a que al principio parecían la pareja ideal para el banquillo culé, pronto se vieron superados por la gestión de figuras como Lionel Messi y compañía.
Pero todo eso ya es pasado para Sarabia, que sigue recuperando su prestigio.
Las derrotas contra Alavés y Espanyol precedieron la visita del Elche a Barcelona, donde los franjiverdes decidieron no renunciar a su estilo ni siquiera ante uno de los ataques más potentes de LaLiga.
Sarabia quiere un equipo valiente
Pase lo que pase, Sarabia está convencido de que su equipo debe ir a por el partido ante cualquier rival, y esa valentía le ha dado buenos resultados al Elche en lo que va de temporada.
Hasta la derrota ante el Alavés, el equipo estaba invicto, con empates de mérito fuera de casa ante Sevilla y Osasuna, y también logrando frenar al Athletic Club en el Martínez Valero.
Al no achicarse ante oponentes teóricamente superiores, el Elche se ha convertido en un equipo peligroso.
Los rivales saben que tendrán ocasiones ante un equipo que juega con total libertad, pero es precisamente esa 'libertad' que fomenta Sarabia la que hace que el Elche sea imprevisible y muy atractivo de ver.
Iñaki Peña, clave en la salida de balón del Elche
Si recordamos que en su última temporada en Primera tardaron 20 partidos en ganar y acabaron a 12 puntos del penúltimo, el cambio logrado por Sarabia y su cuerpo técnico es impresionante.
Buena parte del juego comienza con el portero cedido por el Barça, Iñaki Peña, que inicia la jugada desde atrás.
Especialista en el pase corto, puede considerarse desafortunado porque Hansi Flick no contara con él tras haber cumplido bien cuando Marc-Andre ter Stegen estuvo lesionado.
La capacidad de Peña para encontrar compañeros tanto por dentro como por fuera ha sido sobresaliente, permitiendo al Elche avanzar rápido y mover el balón con precisión y verticalidad.
Un soplo de aire fresco para LaLiga
Con el equipo volcado arriba, E. Sarabia apuesta por una defensa adelantada para encerrar al rival y presionar en todas las zonas. Ante el Levante, por ejemplo, el Elche tuvo más del 95% de posesión en los primeros 20 minutos.
Juegan sin ningún tipo de miedo; el central David Affengruber suele ser el encargado de dar el primer pase para que los más talentosos, como Aleix Febas, puedan desplegar su fútbol.
Para Elche y Espanyol, esta podría ser su mejor temporada en cuanto a resultados en mucho tiempo.
Queda bastante por delante, por supuesto, pero mientras sigan fieles a su estilo, sus aficionados estarán con ellos, ganen, pierdan o empaten.
Un auténtico soplo de aire fresco para LaLiga.

