La corona convirtió al ariete, al portero senegalés Edouard Mendy (ex del Chelsea) y al atacante argelino Riyad Mahrez (ex Manchester City) en los primeros futbolistas en alzar la Liga de Campeones de la UEFA y su par asiática.
"Estoy muy contento y muy orgulloso del equipo", declaró Firmino, de 33 años, miembro importante de los 'Reds' de Jürgen Klopp que se alzaron con la Champions europea en 2019.
"Contento de hacer historia aquí y de poder devolver el apoyo al club, a la familia y a los amigos", agregó.
El otrora futbolista de la Canarinha fue nombrado el jugador más valioso de la Liga de Campeones de la AFC después de comandar la victoria (2-0) sobre el Kawasaki Frontale de Japón y convertir al club de Yedá en campeón asiático por primera vez.
"Mentalidad monstruosa"
Firmino marcó seis goles de camino a la final y volvió a ser decisivo en la pugna por el título.
En el minuto 35, el veterano atacante sirvió un pase a su compatriota Galeno para que éste rematara con rosca a la escuadra.
Poco después envió un centro milimétrico que el marfileño Franck Kessie cabeceó a la red.
"Este título demuestra que tenemos una mentalidad monstruosa", declaró Firmino. "Siempre creímos que podíamos ser campeones y lo hemos conseguido", agregó.
El entrenador del Al-Ahli, Matthias Jaissle, elogió a los 58.000 aficionados que se dieron cita en el estadio King Abdullah Sports City de Yedá por haber contribuido a la victoria.
"Estoy muy orgulloso de los jugadores por cómo lo han hecho, por cómo han rendido, por cómo ha transcurrido el viaje en esta competición", declaró el técnico alemán.
"También a los aficionados, que han creado un ambiente increíble que nunca damos por sentado. Juntos podemos conseguir cosas especiales y así ha sido esta noche. Es bonito devolverle algo a la afición", apuntó.
"Viaje de locos"
La victoria fue aún más notable si se tiene en cuenta que hace tres años el Al-Ahli perdió la categoría en la Saudi Pro League.
"Ha sido un viaje de locos. No hace tanto parecía completamente distinto", afirmó Jaissle.
El entrenador del Kawasaki, Shigetoshi Hasebe, admitió que su equipo había sido superado.
Después de eliminar al Al Sadd catarí en la prórroga y de dar la sorpresa ante el Al-Nassr saudita de Cristiano Ronaldo, Hasebe admitió que sus cansados jugadores habían sido incapaces de volver a dar la talla en su tercer partido complicado en siete días.
"Merecieron ser campeones", dijo Hasebe. "Pudieron mostrar su fuerza, sobre todo en la primera parte, y nosotros no pudimos", concluyó el técnico nipón.