Tras 23 partidos sin derrota, el PSG volvió a ser una apisonadora ante el Liverpool el miércoles, pero se encontró con el arquero Alisson Becker y fue penalizado en el minuto 87 con el gol de Harvey Elliott en el único tiro entre los tres palos de los Reds.
"El fútbol puede ser injusto, hay que aceptarlo. Había un equipo muy superior al otro, simplemente Alisson hizo cinco paradas excepcionales", resumió su técnico Luis Enrique.
"Habrá un ambiente agresivo, pero no tenemos nada que perder, ya le hemos dado la vuelta a este tipo de situaciones", añadió el español, seguramente haciendo referencia a los cuartos europeos del pasado año cuando su equipo perdió en casa 3-2 ante el Barcelona y remontó 4-1 en la vuelta.
Pero antes, un viaje a Bretaña para chocar contra el Rennes. El PSG juega en la Ligue 1 con la tranquilidad que le da su diferencia de 13 puntos con el segundo clasificado, el Marsella, un colchón que permitirá a Luis Enrique dosificar a su tropa.
Entre los que podrían tener un respiro, Ousmane Dembele, que ante el Liverpool se quedó sin marcar por segunda vez en 2025. El extremo reconvertido en 'killer' suma 18 tantos desde el 1 de enero.
El Lille (5º), el otro equipo francés que disputa los octavos de la Champions, recibe el sábado al colista Montpellier -cinco derrotas consecutivas con un solo gol marcado- tras su esperanzador empate (1-1) en la difícil cancha del Borussia Dortmund.
Además, el Niza-Lyon que cierra la jornada el domingo será el partido sin técnicos ya que tanto el local Franck Haise como el visitante Paulo Fonseca están suspendidos.
Este último recibió una sanción histórica, casi nueve meses sin sentarse en el banquillo -hasta el 30 de noviembre-, tras encararse rozando la frente del colegiado con la suya propia el pasado domingo tras ser expulsado en el triunfo 2-1 ante el Brest.
Haise cumplirá el segundo de sus tres partidos de suspensión por criticar al árbitro en la derrota del Niza ante el Saint-Brieuc en la Copa de Francia (2-1).