Los aficionados, en su mayoría italianos de la Juventus, murieron al derrumbarse un muro después de que seguidores del Liverpool les atacaran antes de la final de la Recopa de Europa disputada en Bruselas en 1985.
Más de 600 resultaron heridos en una de las peores catástrofes ocurridas en un estadio de fútbol, que provocó la expulsión de los clubes ingleses de las competiciones europeas durante cinco años.
"Titulado Forever Bound, el nuevo monumento conmemorativo sustituirá a la placa situada actualmente en la pared de la tribuna Sir Kenny Dalglish y se trasladará a una nueva ubicación en el estadio", señaló el Liverpool en un comunicado.
"El nuevo monumento contará con dos bufandas atadas, que simbolizan la unidad y la solidaridad entre los dos clubes y el vínculo formado a través del dolor compartido y el respeto mutuo tras el desastre".
El Liverpool señaló que los planes para el nuevo monumento han sido compartidos con la Juventus y las familias que perdieron a sus seres queridos.
El monumento se inaugurará a finales de verano. La Juventus inaugurará su propio monumento cerca del Allianz Stadium el 29 de mayo, aniversario de la catástrofe.
"Ver un nuevo monumento conmemorativo creado con tanto esmero significa mucho, y es increíblemente importante tener un tributo apropiado para recordar a los 39 aficionados que perdieron la vida", dice el comunicado del Liverpool, citando a Ian Rush, que jugó en ambos clubes y también fue testigo de la tragedia en 1985.
"Nunca debemos olvidar por qué esto es importante y por qué seguimos unidos en solidaridad todos estos años después".