Se considera que lo más probable es que la operación se desbloquee por completo una vez que se dispute su partido contra los actuales campeones, el 25 de agosto.
Sin embargo, dentro de St James’ Park, la frustración por la postura de Isak va en aumento. Su actitud se ha convertido en una distracción tal que, en lugar de intentar reintegrarlo, los altos cargos ahora se centran más en sacar el máximo beneficio económico posible por su venta.
El Newcastle, cerca de dar luz verde a su salida
Aunque el Newcastle se resistió inicialmente a venderlo, quienes antes bloqueaban la operación empiezan a aceptar que dejar marchar al delantero podría ser lo mejor para el club.
Por su parte, Isak se ha mantenido firme en su decisión. No ha cambiado su postura desde que comenzó la temporada y el internacional sueco sigue decidido a convertirse en jugador del Liverpool.
La victoria 4-2 del viernes 15 de agosto por la noche ante el Bournemouth dejó claro el potencial ofensivo del Liverpool, y Isak está convencido de que pronto formará parte de ese ataque.
La oferta inicial del Liverpool de 110 millones de libras (127 millones de euros) tendrá que aumentar considerablemente, pero el delantero ha recibido nuevos ánimos en la última semana, ya que los Reds siguen decididos a ficharlo.
El Newcastle sigue insistiendo en fichar a otro delantero antes de autorizar la salida de Isak, aunque se espera que esa búsqueda se acelere en los próximos días.
Esta situación ya ha afectado la preparación del Newcastle en el inicio de la temporada, y fuentes admiten que ha alterado su planificación para la campaña.
El problema se agravó por la ausencia de un delantero centro fiable en el empate 0-0 de ayer ante un Aston Villa que jugó con 10 hombres.