Contabilidad falsa. Esta es la acusación contra Aurelio De Laurentiis por la operación que llevó a Victor Osimhen del Lille a Italia por 70 millones de euros, 20 de los cuales se pagaron con los pases del portero Orestis Karnezis y los canteranos Luigi Liguori, Claudio Manzi y Ciro Palmieri, valorados en unos 5 millones de euros cada uno.
La Fiscalía de Roma cerró la investigación este viernes y otros miembros de la dirección del club están siendo investigados: junto al presidente De Laurentiis, también son objeto de este proceso su esposa (vicepresidenta del Nápoles), sus dos hijos y algunos miembros de la dirección del club azzurro.