A partir del minuto 17 de un partido interrumpido por un episodio dramático, que afortunadamente no resultó fatal, la Fiorentina y el Inter se enfrentaron en un jueves inédito del campeonato. Calendario exigente para dos equipos comprometidos con Europa. Y fue el equipo de Simone Inzaghi el que apretó de inmediato el acelerador, con Lautaro y Bastoni estimulando los reflejos goleadores de De Gea y Ranieri, respectivamente.
Después de que el gol de Carlos Augusto fuese anulado por fuera de juego, los Viola intentaron despertar, con un centro de Parisi para la irrupción de Kean, cuyo cabezazo fue demasiado centrado para inquietar a Sommer, que desbarató una excelente ocasión. Otra buena oportunidad llegó justo antes del minuto 40 para Dodo, que, desplegado como lateral derecho, logró colarse en una posición de extremo tras un espléndido pase hacia delante de Kean. Sin embargo, una vez dentro del área nerazzurra, el brasileño erró su disparo, que acabó fuera por el segundo palo.
Junto con el frío, también aumentaron las ganas del Inter de romper el empate, basándose principalmente en la posesión del balón para jugar activamente el partido. Con una Fiorentina sin demasiadas ocasiones, el ritmo de los locales se fue debilitando. La única esperanza era organizar alguna que otra salida esporádica. Y tras una arremetida por la izquierda, los Viola obtuvieron un saque de esquina del que Mandragora sacó a Ranieri al borde del área. El capitán toscano conectó una volea con la zurda que entró en la portería de Sommer, haciendo subir el volumen en el Franchi.
Kean muestra su valía
Un minuto después, el goleador también se distinguió por un decisivo despeje a bocajarro ante Lautaro en un duelo entre capitanes. Obligados a encerrarse como podían y a replegarse de nuevo, los locales buscaron el apoyo de un público local entusiasta a pesar de la baja temperatura. Y en el minuto 68, después de que Richardson arrancase el balón de los pies de Calhanoglu, Dodo llegó con un centro largo para Kean, cuyo remate burló a Sommer por el primer palo.
Poco después, Inzaghi dio entrada a Barella, Arnautovic y Dimarco por Calhanoglu, Mkhitaryan y Carlos Augusto. El delantero turco fue el epítome de la frustración nerazzurra, mientras que el lateral izquierdo lo intentó en el minuto 75 con un disparo desde el centro del campo que no logró sorprender a De Gea. Otro intento fue el de Lautaro con un disparo desviado que acabó en el exterior de la red, con Arnautovic y Thuram esperando en vano el balón en el área.
Entre la espada y la pared, el técnico nerazzurro apostó por introducir a Taremi por Frattesi, apostando así por un ataque de cuatro hombres. Palladino, por su parte, mantuvo en el campo a todos sus titulares, entre ellos a un muy generoso Beltrán, que en el minuto 82 remató una posible incursión de Thuram en el área con un impecable y perfecto disparo en diagonal. Después, la puntilla nerazzurra, con un pase atrás de Dimarco sin mirar, que Kean aprovechó para marcar fácilmente el 3-0, llegando a 15 tantos en la tabla de goleadores. El gol de la alegría dedicado a Bove, y que no permitió al Inter engancharse al Nápoles en lo alto de la tabla.
Los nerazzurri se quedan a tres puntos de los partenopeos, mientras la Fiorentina alcanza la cuarta plaza en la tabla.

Jugador Flashscore del partido: Moise Kean (Fiorentina)