El agente, de 31 años, fue herido en el muslo y hospitalizado con hemorragia. Los médicos intentaron amputarle la pierna para salvarle la vida.
Los actos violentos tuvieron lugar el 7 de diciembre entre miembros de los dos clubes rivales de la capital griega, Olympiacos y Panathinaikos, y un joven de 18 años fue detenido por lanzar un petardo contra la policía.