El conjunto oscense estaba en una situación muy delicada de cara a su compromiso liguero debido a un virus gastrointestinal que afecta "a prácticamente la totalidad de la plantilla". De ahí que solicitaran formalmente a la Federación Española el aplazamiento del duelo entre aragoneses y donostiarras, programado para este sábado a las 21:00 horas CET.
"El club ha presentado la solicitud cumpliendo con los requisitos establecidos, en virtud de lo dispuesto en el artículo 262.3 del Reglamento General de la RFEF, al no contar con el número mínimo de jugadores disponibles, tras la valoración de los servicios médicos, que han determinado la imposibilidad de afrontar el partido con las debidas garantías", expone el Huesca.
Horas después ha llegado la confirmación de la suspensión. "El Juez Único de Competiciones Profesionales acuerda que no se dispute el enfrentamiento correspondiente a la jornada 10 de Segunda División por motivos médicos".
De hecho, los autocares de los aficionados, que tenían previsto salir a las 9:30 rumbo a San Sebastián para acompañar al equipo, habían retrasado su salida hasta nuevo aviso. Finalmente, se han cancelado también esos desplazamientos.
El filial de la Real ocupa actualmente la 19ª posición de la tabla clasificatoria después de haber acumulado nueve puntos, mientras que su rival es octavo con 13 unidades. Los donostiarras, paradójicamente, han anotado seis tantos más e incluso cuentan con un golaveraje más favorable (-2 contra -3).
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