El canciller, que anunció desde Bruselas que conversaría en breve con su equivalente israelí, calificó las palabras de Thomas Portes, del partido La Francia Insumisa (LFI, izquierda radical), de "irresponsables y peligrosas".
"Quería decir en nombre de Francia que la delegación israelí es bienvenida en Francia para estos Juegos Olímpicos", dijo a su llegada a una reunión con sus homólogos de la Unión Europea en Bruselas.
El sábado, durante una concentración en apoyo al pueblo palestino, Portes aseguró que "los deportistas israelíes no son bienvenidos a los Juegos Olímpicos de París" y llamó a "crear movilizaciones".
El ministro centroderechista del Interior, Gérald Darmanin, lo acusó de "poner una diana en la espalda de los atletas israelíes", con un "tufo de antisemitismo". La comunidad judía en el país galo también condenó sus palabras.
Tras la ola de indignación, el diputado precisó el domingo que defendía una posición "clara y constante" de LFI.
"La diplomacia francesa debe presionar al Comité Olímpico Internacional para que la bandera y el himno israelíes no sean autorizados durante estos Juegos Olímpicos, como ocurre con Rusia", aseguró el diputado, quien habló de "doble rasero".
El ministerio del Interior dijo a la AFP que llevará a cabo "ajustes" en los dispositivos de seguridad para algunas delegaciones, como las de Israel, Estados Unidos o Irán.
En abril, una fuente de seguridad explicó que algunas, como las de los atletas israelíes y estadounidenses, tendrían sus "propios" medios para garantizar su seguridad.
Los JJ. OO. tendrán lugar del 24 de julio al 11 de agosto. Los atletas rusos y bielorrusos competirán bajo bandera neutral, tras la invasión rusa de Ucrania iniciada en febrero de 2022.