Ledecky ganó el séptimo oro de su carrera en la prueba, pero se enfrentó a un desafío sin precedentes: tocó la pared en 8:05.62 segundos, récord del campeonato, apenas por delante de la australiana Lani Pallister (8:05.98) y de McIntosh (8:07.29).
Fue la primera derrota de McIntosh en el campeonato y puso fin a su intento de igualar a Michael Phelps como el único nadador que ha ganado cinco oros individuales en un solo campeonato del mundo. La joven de 18 años ya ha ganado tres oros esta semana en Singapur.
Ledecky, de 28 años, tuvo demasiado aguante para su joven rival, y Pallister también estuvo en la lucha por la medalla de oro hasta la recta final.
“Me presionaron hasta el final”, declaró Ledecky, cuatro veces campeona olímpica de la prueba.
“Estoy muy contenta de haber podido conseguirlo. Me decía a mí misma que confiara en mis piernas.”
La carrera se anunciaba como un posible cambio de guardia, con McIntosh en plena forma. También había amenazado el récord mundial de Ledecky a principios de año.
Pallister estaba decidida a incluir también su nombre en la conversación, ya que la australiana mantuvo el ritmo de Ledecky y McIntosh en una rápida salida.
El liderato cambió de manos en varias ocasiones, pero Ledecky, nadando entre sus dos rivales, parecía la mejor situada para alcanzar la meta.
Al final, la estadounidense lo celebró con la bandera de su país en la cubierta de la piscina tras una carrera épica.
“Creo que esta noche he intentado disfrutarlo tanto como he podido”, declaró Ledecky. “No siento que tenga mucho que perder en este momento de mi carrera.
“Simplemente intento disfrutar cada vez que salgo delante de una multitud como esta.”
El equipo mixto estadounidense de relevos 4x100 estilo libre se hizo con el oro en Singapur en 3:18.48, superando el anterior tiempo líder de Australia de 3:18.83 establecido en 2023. El equipo de “atletas neutrales” de Rusia terminó segundo en 3:19.68, y Francia tercero en 3:21.35.
El equipo estadounidense de Jack Alexy, Patrick Sammon, Kate Douglass y Torri Huske tomó el control desde el principio y a partir de entonces su batalla fue contra el reloj.
“Todos salimos esta noche con ganas de conseguir la victoria para el equipo de Estados Unidos y, con el récord mundial, todos sabíamos en el fondo de nuestra mente que teníamos esa capacidad”, dijo Douglass.
“Estoy muy contenta de cómo ha salido.”
Estados Unidos encabezaba el medallero al comienzo de la jornada y su último éxito consolidó su liderato de cara al último día de los campeonatos.
“Es fantástico competir con mis compañeros”, declaró Alexy. “El récord mundial estaba en nuestra mente.”