La victoria de su hermano Álex el pasado fin de semana en Cataluña impidió que Marc pudiera conquistar su séptimo título de MotoGP en Misano, donde hubiese igualado los nueve títulos mundiales de Rossi (junto a los de 125 cc y Moto2).
"Intenté tener bola de partido aquí porque ya he dicho que me da igual dónde y cuándo (ser campeón), pero intentar que sea lo antes posible. Pero hubo un piloto que fue más rápido que nosotros en Cataluña", declaró en Misano Márquez al ser preguntado por la victoria de Álex el pasado domingo.
Pero con 182 puntos de ventaja sobre Álex Marquez y 250 sobre Francesco Bagnaia, que cuenta con la misma moto que el catalán de 32 años, y siete Grandes Premios por delante aún, el título para el mayor de los Marquez es cuestión de tiempo.
Bastará con un séptimo puesto en la carrera esprint del sábado, siempre que la gane su hermano Álex, para que Marc tenga el derecho de aspirar al título en Motegi (26-28 de septiembre).
"El podio (en cada carrera) es mi prioridad número uno de aquí a final de temporada", declaró Márquez, que tiene motivaciones suficientes para luchar por la victoria en Misano: Ducati corre en casa, el '93' ya cuenta con cinco victorias en este trazado y tendrá enfrente a toda la armada de pilotos italianos que querran triunfar en su país.
Lucha por el subcampeonato
"Este circuito es como mi jardín", declaró en la previa Francesco Bagnaia, vencedor en este trazado en 2022.
El piloto italiano, además, querrá olvidar lo antes posible el desastroso fin de semana vivido en Montmeló, donde quedó en el 21º puesto de la parrilla de salida (su peor posición desde abril de 2022 en Portugal), aunque el domingo pudo remontar hasta acabar séptimo en el Gran Premio.
Y con 68 puntos de diferencia entre Álex Márquez y 'Pecco' Bagnaia, el subcampeonato está aún abierto para ambos.
Con el objetivo de acabar al menos en el podio estarán los locales Enea Bastianini (tercero el pasado fin de semana), Fabio Di Giannantonio y Marco Bezzecchi, que en Montmeló se tocaron y acabaron ambos en el suelo.
El vigente campeón del mundo, el español Jorge Martín (Aprilia), también tratará de ser más ambicioso tras sumar en Cataluña el primer punto de una temporada muy complicada, en la que una doble operación le impidió competir durante la primera parte del curso.
Adiós a MotoE
Fue en esta misma pista donde Martín realizó el último test con su Aprilia antes de su regreso al campeonato.
Al margen del Gran Premio de Italia, la Federación Internacional de Motociclismo (FIM) y Dorna Sports, la empresa organizadora del campeonato, anunciaron el jueves que MotoE, el Mundial de motos eléctricas, ya no se disputará en 2026.
Esta categoría, que forma parte de los fines de semana de carreras junto a Moto3 y Moto2, además de MotoGP, no ha logrado "suficiente popularidad" durante las siete temporadas en la que ha existido.
"No hemos alcanzado nuestros objetivos, ni tampoco los ha alcanzado la industria asociada a las motos eléctricas de alto rendimiento", admitió el vicepresidente de la FIM, Jorge Viegas, en el texto oficial.