El automovilismo español alcanza así una nueva cumbre justo 20 años después de su primer campeonato de Fórmula 1 logrado por Fernando Alonso.
Palou, tricampeón de la serie IndyCar estadounidense, ejecutó una hábil estrategia a lo largo de una caótica carrera con una decena de abandonos que el mexicano Pato O'Ward concluyó en el cuarto lugar.
El catalán, de 28 años, se mantuvo siempre en los puestos de cabeza a la espera de lanzar su ataque definitivo sobre Ericsson, ganador de la prueba en 2022, cuando restaban 14 vueltas del total de 200 y superarlo por apenas 0.682 segundos.
Tras superar al sueco por apenas 0.682 segundos, Palou detuvo su monoplaza sobre el asfalto y corrió hacia los integrantes de su equipo, Chip Ganassi, dando saltos de alegría.
"No me lo puedo creer, qué día tan increíble, qué carrera tan increíble", declaró a la cadena Fox el ganador, que había arrancado desde el sexto lugar de la parrilla.
"Todo el plan salió increíble. Creo que hoy el circuito y los fans me han escogido", afirmó. "Mi equipo ha hecho un trabajo excelente todo el mes de mayo pero especialmente hoy, con los 'pit stops' y la estrategia".
A continuación llegaron el estadounidense David Malukas y O'Ward, que también pugnaba por un primer triunfo para México.
El corredor de Monterrey, que el año pasado dejó escapar la victoria en la última vuelta, se quejó de la gran cantidad de banderas amarillas que interrumpieron la carrera.
"Creo que ha sido la peor Indy 500 de la que he sido parte. Había inexperiencia en las arrancadas, esto no puede pasar en esta carrera, fue un poco frustrante", lamentó.
Primer triunfo en un óvalo
Palou y O'Ward, que arrancó desde el tercer lugar, eran los grandes favoritos en las apuestas para esta edición 109 de las 500 Millas.
El español llegaba a la contienda en su mejor momento después de acaparar cuatro triunfos en los primeros cinco Grandes Premios de la temporada de IndyCar.
Ganador de esta competición en 2021, 2023 y 2024, Palou nunca había vencido en un circuito ovalado como el mítico Indianapolis Motor Speedway (2,5 millas - 4 km), que este domingo registró un lleno con más de 350.000 espectadores.
El corredor catalán llevaba cuatro años tocando a la puerta de este prestigioso triunfo que Fernando Alonso, dos veces campeón de la F1, nunca pudo lograr en sus tres intentos (2017, 2019 y 2020).
El ganador de las dos últimas ediciones, Josef Newgarden, abandonó a 59 vueltas del final después de haber escalado desde el puesto 32 inicial hasta el séptimo.
Las posibilidades del estadounidense de conquistar una inédita tercera corona consecutiva estaban diezmadas por la sanción al equipo Penske que lo hizo comenzar desde el fondo de la parrilla.
Por su parte, el brasileño Helio Castroneves, de 50 años, finalizó en el decimotercer lugar en su búsqueda de una quinta corona que lo hubiera convertido en el mayor ganador en solitario del evento.
Una carrera accidentada
La carrera vivió un arranque muy accidentado después de una tensa espera de 50 minutos por la lluvia que los pilotos pasaron en sus monoplazas.
El neozelandés Scott McLaughlin (Penske), uno de los principales candidatos, fue el primero en estrellarse en la propia vuelta de calentamiento.
El ruso-israelí Robert Shwartzman (Prema Racing), primer novato en salir desde la 'pole position' desde 1983, perdió rápidamente el liderato a manos primero de O'Ward y después del japonés Takuma Sato.
En medio de continuas interrupciones por accidentes y lluvia, los nervios y la agresividad de los pilotos fue en aumento al acercarse el ecuador de la carrera.
El joven Shwartzman abandonó después de una caótica entrada a boxes en la que golpeó a cuatro de sus mecánicos mientras el estadounidense Kyle Larson se estrelló arrastrando también a Kyffin Simpson y Sting Ray Robb.
Superada la vuelta 100, la carrera se estabilizó con Palou siempre posicionado entre los cinco primeros a la caza del zarpazo definitivo.
El español encontró ese momento a falta de 14 vueltas y adelantó al líder Ericsson para rodar después sin oposición hasta el final.
"No sabía si iba a ser capaz de superar a Marcus", reconoció después Palou. "Teníamos que guardar neumáticos y combustible pero cuando tuve la oportunidad de adelantarle pensé que había que aprovecharla".