Sobre la altura de Madrid: "Oímos mucho que Madrid es muy diferente para la tierra batida, ya sabes, las condiciones aquí son rápidas, es la altitud. Yo diría que la dificultad aquí es obviamente más la altitud, ya ves cuánta altitud hay en comparación con otros torneos. La pelota vuela como lo hace, si no la golpeas perfectamente, digamos en una devolución o en un golpe de carrera, entonces... ya sabes, va a volar así o puede volar así... Es difícil, porque tienes que ajustar tu tensión, quiero decir, subí tres kilos, que es mucho".
Adaptarse a las condiciones: "Luego vas al US Open y la mayoría de las pistas son rápidas. Creo que hay que adaptarse al juego, juegues donde juegues. Además, en el Reino Unido, cuando hace sol y calor, se juega diferente que cuando hace frío. Creo que sólo se juega igual cuando se juega en indoor".
Un duro bache emocional: "Realmente me afectó. Yo estaba en un muy mal lugar mentalmente. Y lo dije, y creo que... Estoy triste porque fue traducido de la manera equivocada. En Grecia, lo tradujeron como que yo estaba teniendo este gran problema, y yo no veo cuáles son los problemas de otras personas. Sé lo que pasa en este mundo, y sé que otras personas tienen problemas mayores que yo. Pero, personalmente, si me fijo en mí misma, fue muy duro emocionalmente. Mentalmente, no estaba en un buen lugar y mi cuerpo no podía soportarlo. Pero fue bueno que me lesionara y tuve tiempo para superarlo. Pero esos días, los primeros días, fueron muy duros. Tuve que dejar Atenas. Me fui a la academia de Rafa, en el norte de Atenas, a entrenar, para alejarme de todo"